Los tres jueces de un tribunal de apelación confirmaron este miércoles la condena por corrupción al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y aumentaron la sentencia inicial a 12 años y un mes de cárcel, complicando sus aspiraciones presidenciales.

Lula, que aún dispone recursos para evitar la prisión, fue considerado culpable de haberse beneficiado de un apartamento tríplex ofrendado por la constructora OAS a cambio de su mediación para obtener contratos en Petrobras. La condena inicial era de nueve años y medio de cárcel.